Nuestra historia
Toda ciudad tiene en su haber lugares emblemáticos, hechos históricos que sobreviven generaciones y personajes ilustres o populares que se han quedado en la memoria de sus vecinos. Luego hay historias especiales en las que confluyen todas estas circunstancias. La de Asunción Muriedas es una de ellas.
Asunción fue una de las muchas personas que el 3 de noviembre de 1893 se encontraba en los alrededores del muelle cuando explotó el Cabo Machichaco. La magnitud de la deflagración hizo que volara, literalmente, por los aires y, en el accidente, perdiera una pierna. Desde entonces, fue apodada como ‘La Voladora’, sobrenombre que la acompañó durante el resto de su vida.
128 años después, hemos querido traer al presente a este popular personaje santanderino a través de un nuevo restaurante, ‘La Voladora’, anexo al otro proyecto de restauración en la capital que ya tenemos, Daria.
Bonifaz 21
En 2021 nace un nuevo espacio de sabor
Mural de 7 metros
Compuesto por 510 azulejos pintados a mano por el Atelier de la empresa cántabra Bathco, preside el comedor principal.
510 azulejos pintados a mano
La composición rinde homenaje a la figura de La Voladora y está basada en una ilustración realizada por Alfonso Piñeiro.
Representación en forma de sirena
Representa al personaje de forma alegórica como a una sirena, sentada en la roca de la playa del Camello y con el faro de Cabo Mayor al fondo, dos emblemas turísticos de Santander.
Un nuevo espacio de sabor
El restaurante, reformado por el estudio de interiorismo Aedificare, respira su misma esencia pero con una personalidad propia. En ambos espacios conviven materiales como el microcemento, la madera, cadenas negras o azulejo de metro, pero en cada uno se han aplicado e interpretado de manera distinta, consiguiendo despertar emociones diferentes entre los comensales pero sin perder el vínculo entre ellos.
El local ofrece una zona pequeña de barra, un banco corrido perfecto para el vermú o picar algo, un espacio central con un conjunto de mesas más íntimas y, al fondo, plantea una gran mesa, separada del resto, para comidas y cenas en grupo.
Ubicado en el 21 de la calle Bonifaz, desde el mismo centro de Santander en pleno Puertochico, ofrecemos un ambiente informal y acogedor donde degustar carnes y pescados a la brasa.